Una de las primeras ideas que se asocia en occidente con las sociedades orientales es hecho de que los asiáticos -y por supuesto los coreanos- están acostumbrados a jornadas laborales muy largas, es decir, que trabajan mucho. Por otro lado, el trabajar mucho puede también relacionarse a la dedicación, esfuerzo y consistencia en el trabajo arduo, como características que justifican el rápido desarrollo de Corea en las últimas décadas; pero lo que no siempre se conoce, es que así como se trabajan extenuantes jornadas, también es cierto que hay muchas opciones para liberarse del estrés diario.
Empecemos hablando de la rutina de un trabajador de oficina por ejemplo: Seúl es una ciudad bastante grande y, aunque el horario laboral suele iniciar a las 9:00 AM de lunes a viernes, pues la mayoría tiene que salir mucho antes para llegar a tiempo a su destino, pues para algunos puede tomar hasta cerca de dos horas el traslado de la casa a la oficina dependiendo de si viven en la ciudad o en las ciudades satélite; por lo que los coreanos, salen de sus hogares desde muy temprano, ¡tanto como desde las 5 AM!
En realidad, nada tendría de particular el hecho de levantarse temprano para ir a trabajar de no ser por el hecho en que se termina la jornada también un poco tarde, aunque no propiamente por las actividades en la oficina, sino porque luego del trabajo, las personas salen a relajarse y resulta sorprendente que aguanten tanto tiempo liberando el estrés y que al día siguiente, frescos como lechugas acudan sin falta a trabajar.
Entre las opciones para relajarse encontramos muchas, pero por supuesto que la primera es salir a cenar ya sea con los compañeros del trabajo, los amigos o la familia; en los días laborales, ya a eso de las 7 u 8 PM los restaurantes están a tope llenos de ejecutivos y empleados recién salidos del trabajo quienes aprovechan para comer y beber juntos a fin de conocerse mejor y muchas veces no sólo para olvidarse de los asuntos del trabajo, sino incluso para discutir algunos puntos o problemas pendientes en un ambiente más amable.
Lo verdaderamente sorprendente a diferencia de otras sociedades occidentales, es que no sólo es cenar y beber, pues muchas de las veces, ¡Esa es sólo la primera ronda! Ya que de ahí, todos juntos se van a alguna de las famosas salas de canto mejor conocidos como “norepang” en donde el estrés se libera en forma de notas musicales por algunas horas y del que ya hablaremos en otra ocasión.
Así pues, cuando escuchen que habitantes coreanos trabajan demasiado, no olviden también que al igual que los deberes, el relajamiento mediante la diversión luego de la jornada laboral, es parte integral del día a día de la sociedad coreana.
Fuente: Kbsworld
Empecemos hablando de la rutina de un trabajador de oficina por ejemplo: Seúl es una ciudad bastante grande y, aunque el horario laboral suele iniciar a las 9:00 AM de lunes a viernes, pues la mayoría tiene que salir mucho antes para llegar a tiempo a su destino, pues para algunos puede tomar hasta cerca de dos horas el traslado de la casa a la oficina dependiendo de si viven en la ciudad o en las ciudades satélite; por lo que los coreanos, salen de sus hogares desde muy temprano, ¡tanto como desde las 5 AM!
En realidad, nada tendría de particular el hecho de levantarse temprano para ir a trabajar de no ser por el hecho en que se termina la jornada también un poco tarde, aunque no propiamente por las actividades en la oficina, sino porque luego del trabajo, las personas salen a relajarse y resulta sorprendente que aguanten tanto tiempo liberando el estrés y que al día siguiente, frescos como lechugas acudan sin falta a trabajar.
Entre las opciones para relajarse encontramos muchas, pero por supuesto que la primera es salir a cenar ya sea con los compañeros del trabajo, los amigos o la familia; en los días laborales, ya a eso de las 7 u 8 PM los restaurantes están a tope llenos de ejecutivos y empleados recién salidos del trabajo quienes aprovechan para comer y beber juntos a fin de conocerse mejor y muchas veces no sólo para olvidarse de los asuntos del trabajo, sino incluso para discutir algunos puntos o problemas pendientes en un ambiente más amable.
Lo verdaderamente sorprendente a diferencia de otras sociedades occidentales, es que no sólo es cenar y beber, pues muchas de las veces, ¡Esa es sólo la primera ronda! Ya que de ahí, todos juntos se van a alguna de las famosas salas de canto mejor conocidos como “norepang” en donde el estrés se libera en forma de notas musicales por algunas horas y del que ya hablaremos en otra ocasión.
Así pues, cuando escuchen que habitantes coreanos trabajan demasiado, no olviden también que al igual que los deberes, el relajamiento mediante la diversión luego de la jornada laboral, es parte integral del día a día de la sociedad coreana.
Fuente: Kbsworld
