Shin Jun-seop, de 25 años, un graduado universitario que actualmente busca trabajo, está deseando convertirse en “amo de casa” una vez que se case.
“No creo que sea mala idea quedarme en casa y criar a los hijos cuando me case, mientras mi esposa continúa su carrera”, dijo Shin. “No es meramente porque tenga dificultades para encontrar un empleo. Quizás no sea el único hombre que esté de acuerdo en ‘revertir’ los papeles”
Pero como Shin cada vez más jóvenes, no importa si tienen empleo o no, tienen la mente abierta sobre convertirse en un “papá que se quede en casa”.
Park Jang-woo, de 30 años y oficinista de Seúl, considera varias veces al día el dejar su puesto cada vez que tiene problemas en su sitio de trabajo.
Con su esposa trabajando como pediatra, Park siente menos carga sobre ser quien traiga el pan a casa: “Creo que podría convertirme en amo de casa”, dijo.
Una encuesta realizada por un periódico de la Universidad Yonsei reveló que casi 4 de cada 10 estudiantes masculinos dijeron que desearían ser “amos de casa” a tiempo completo después del matrimonio.
En la encuesta, hecha a 563 hombres y a 756 mujeres, 209 hombres, un 37% del total, dijeron que no les importaría vivir así si sus esposas ganan dinero suficiente.
Entre ellos, 245, un 43’5%, respondieron negativamente a la pregunta, mientras que 109, el 19’4%, no tenía comentarios.
“Tradicionalmente las mujeres coreanas se suponía que debían cuidar de los hijos y hacer las tareas del hogar, pero una falta de mano de obra en el mercado laboral ha hecho que hoy cambie el papel de marido y esposa haciendo que muchos hombres deseen quedarse en casa para criar a los hijos. Esto significa que los roles y las vidas de los coreanos han empezado a hacerse más diversas”, dijo Lee Chang Ul, profesor de Antropología cultural en la Universidad Yeungnam.
Por otro lado, a la pregunta de si preferían vivir juntos antes del matrimonio el 45% respondió afirmativamente, mientras que el 34’4% dijo que no lo haría.
Respecto al sexo antes del matrimonio, del que ya hablamos en una entrada anterior, casi la mitad de los encuestados respondieron que no había problema, mientras que un 30 dijeron que no estaban de acuerdo.
Además, la mitad de ellos dijeron que creían que el matrimonio era necesario, y un 48% que no se casaría con alguien a quien sus padres no aprobasen, mientras que un 20% aseguraron que sí lo harían.
Por tanto vemos que la tradicional sociedad machista por la que Corea es conocida, cada vez va avanzando más, dejando poco a poco a un lado los tópicos sobre el trabajo, la mujer, el sexo o el matrimonio.
Fuente: Si Es Destino