Después de abandonar la escuela secundaria y prepararse para su examen de GED, el estudiante no tenía suficiente dinero para comprar comida y pasó muchas noches hambriento. Una noche después de la escuela secundaria, notó un carrito de comida y pidió una torta de pescado de 400 wones (~ 40 centavos USD) mientras tomaba 10 tazas de sopa de pastel de pescado gratis. La mujer del carrito de comida debe haberse sentido mal por el niño, así que le dio 10 palitos de pastel de pescado gratis.
"Después de todo, estaban hinchados por lo que nadie los comprará de todos modos. Solo cómalos ". - Kind Food Truck Lady ( la señora del carrito)
El Siguió pasando por el carrito de comida mientras asistía a la escuela, y la generosa dama del carrito de comida continuó dándole pasteles de pescado gratis para comer. impactado hasta el punto de llorar, el juró devolverle un día. Finalmente, el hombre consiguió un trabajo en el departamento de recursos humanos de una gran compañía y decidió ver si la mujer de corazón cálido de sus recuerdos todavía estaba allí.
Incluso seis años después, ella estaba en el mismo lugar, pero su hijo que tenía parálisis cerebral severa en su pierna estaba trabajando a su lado. Estaba claro que no podía encontrar un trabajo debido a su discapacidad. Afortunadamente, el hombre trabajó en una compañía que recluta activamente a personas con discapacidades. Corrió para contarle a su gerente la situación y su gerente aceptó contratar al hijo.
La madre lloró y preguntó: "¿Cómo podría volver a pagar esta bendición?". Pero el hombre rechazó cualquier forma de "pago" porque estaba endeudado en primer lugar.
Estaba en deuda contigo primero. Solo estoy devolviendo esa bendición. - El hombre
Esta conmovedora historia demuestra que un largo camino puede tener un impacto en la vida de una persona en general.
