Las fiestas de cumpleaños son en algunos lugares, celebraciones obligadas y en otros sitios, sólo representan un día más. En el caso de Corea, se suele festejar con un pastel y reunión con los familiares y amigos, pero el evento que requiere de verdad preparación y una gran celebración, es el aniversario número uno de todos las personas, o, en este caso, de los bebés.
Para los extranjeros, resulta particularmente interesante el presenciar una de esas ceremonias tradicionales que marcan el primer cumpleaños, pues en otros países, el primer aniversario no es en realidad muy diferente de los siguientes, pero en Corea, parece que lo que sucede ese día, en realidad podría tener implicaciones en el futuro del bebé.
Hay que empezar por decir que hay dos cosas que caracterizan el evento: primero el tipo de regalos que se dan y segundo, la ceremonia en que el pequeño escoge un objeto relacionado a su futura profesión.
En cuanto a los regalos, cada vez se hace más común que en lugar de juguetes, ropa u otros objetos que son comunes en esas ocasiones en otras latitudes, en Corea, la tradición parece indicar que es más apropiado regalar objetos de oro; como anillos, cadenas o brazaletes para el festejado: los regalos de oro son populares porque aunque el bebé no pueda disfrutarlos conscientemente a tan temprana edad, se pueden intercambiar o vender en el futuro en caso de necesitarse, por lo que podría considerarse incluso como un pequeño fondo de ahorros que puede usarse en caso de una contingencia o cuando ya mayor, el mismo individuo pueda decidir qué hacer con los objetos.
La ceremonia tradicional es el punto clave del festejo, y al parecer, ocurre también en otros países cercanos como en el caso de China, donde en algunas regiones, el primer cumpleaños se festeja igual que en Corea.
En la fiesta del primer aniversario, el bebé es sentado frente a una serie de objetos, entre los cuales hay desde lápices, libros, micrófonos, dinero, pastel de arroz, aguja e hilo, etc. Cabe señalar que objetos como el micrófono no son parte de la tradición, pero las nuevas costumbres han hecho de su incorporación algo indispensable por lo que leerán a continuación:
El propósito de colocar los objetos frente al festejado, es que todos esperan a que el pequeño tome alguno de esos según le llamen la atención y, de acuerdo a ello, se especula sobre lo que será en el futuro; por ejemplo: si toma el lápiz, se creé que será un catedrático, si toma dinero, será hombre o mujer de negocios; si toma el pastel de arroz, dicen que será rico, si toma el aguja e hilo, una persona muy hábil y creativa y así sucesivamente, por lo que hay muchas opciones para el futuro del infante. No es difícil adivinar que si escoge el micrófono, se espera que de grande, el bebé se convierta en un cantante o artista de los medios.
Para el día de la fiesta, los infantes son ataviados con una vestimenta tradicional muy colorida que tiene también un significado relacionado a la suerte y la longevidad que se desea para el pequeño, pues se dice que la raíz de la celebración comenzó en el pasado para festejar la fortuna de que los niños llegaran al primer año de vida dadas las condiciones de vida tan duras que existían.
Debido a la relevancia del evento, la celebración no suele ocurrir en la casa de los padres, sino que se rentan sitios especiales como los salones de bodas, ya que acuden muchas personas para festejar junto a la familia, el logro de vida del bebé, desearle lo mejor y por supuesto, tener una idea de lo que podría ser en el futuro según la tradición.
Fuente: Kbs